Aldaba reabre sus puertas envuelto en un halo de cambios que acomete en un momento crucial de su trayectoria, cuando está a punto de conmemorar su 20 aniversario. Después de dos décadas siendo un referente claro de la alta gastronomía de Madrid, esta cifra redonda le proporciona el empuje necesario para dar el salto hacia una etapa más actual, rompedora y cercana a su público.
La remodelación del restaurante, de la mano de la interiorista Isabel López Vilalta — responsable también de la decoración de otros grandes restaurantes como Celler de Can Roca o Filandón, entre otros—; o el cambio en su imagen corporativa; pasando por la gran apuesta en los fogones del cocinero —como le gusta que le denominen— Antonio del Álamo; y el magnífico fichaje, especialmente para los amantes del vino, del sumiller Javier Gila, conforman la lista de ingredientes necesaria para augurar el éxito en la nueva andadura del restaurante. Todo ello con la bendición de su alma mater, el jefe de sala, que continúa siendo José Luis Pereira.
Cambio de Look
El nuevo escenario aúna en perfecto equilibrio materiales novedosos y a la vez elegantes que otorgan un giro rompedor a la imagen del restaurante. El interior se ha revestido con formica y terciopelo en tonos claros y brillantes para dar amplitud a la sala, consiguiendo un óptimo contraste con los techos y las paredes, que mantienen su antigua estructura de madera.
La iluminación juega un papel fundamental en el nuevo Aldaba. Junto a diferentes puntos de luz, se han dispuesto unas luminarias verticales que se suspenden del techo y que al utilizar los muros como reflector, proporcionan una agradable sensación de amplitud.
Para la fachada del restaurante se ha utilizado acero inoxidable y formica de color negro que persigue reflejar de manera sorprendente y atractiva la imagen de los árboles que se abren paso hacia la puerta del local.
Todo ello unido a un nuevo mobiliario, procedente de Londres, más atractivo, moderno y a la vez elegante.
Entre los fogones, Antonio del Álamo
Su incorporación como nuevo cocinero llega como una apuesta clara por seguir manteniendo Aldaba como uno de los grandes referentes de la restauración madrileña. Su cocina, que él mismo define como «tradicional, abierta al mundo» armoniza lo mejor de nuestra gastronomía, el plato «como siempre lo hemos conocido», pero con un toque innovador y creativo, adaptado a los nuevos tiempos. El restaurante continúa apostando por los productos de temporada, pero al mismo tiempo abre su carta a nuevas propuestas, donde combinan a la perfección los platos de toda la vida con la introducción de técnicas más moderas.
Javier Gila, nuevo sumiller
Junto con Antonio del Álamo, conforman el tándem perfecto para disfrutar del mejor almuerzo o cena. Aldaba ha apostado por todo un maestro en el arte de asesorar un buen vino, un excelente profesional que cuenta con innumerables premios en su haber.
Gila dirigirá una bodega con más de 500 referencias de vinos nacionales e internacionales, y en torno a 3.000 botellas clasificadas, un complemento incuestionable a la excelente gastronomía del restaurante.
No hay comentarios:
Publicar un comentario