Por: Julián Carazo
A menos de 100 kilómetros de Madrid, en el corazón de los Montes de Toledo y en la Ruta del Quijote y de los Castillos, se encuentra un pequeño pueblo, Almonacid de Toledo; declarado conjunto histórico artístico por sus emblemáticos monumentos y sus frescos de la Ermita de Nuestra Sra. de la Oliva. A las afueras del pueblo, en la carretera a Chueca, se alza VILLA NAZULES, un complejo turístico o resort como le gusta a Mariola que lo denominen. Dispone del Club Hípico San Jose, el Wellness-Spa Agua y Luz, el Restaurante Mar de Olivos, el Hotel Canino Cantydubi y el Hotel de 4 estrellas Villa Nazules. Rememorando la Batalla de Almonacid, VILLA NAZULES existe, para el descanso del guerrero, que en la actualidad, somos los que luchamos a diario con el asfalto, las prisas y el estrés; y para que la desconexión sea total, la familia Hernandez compuesta por Rocio, Mariola, Tania y Jose, han creado este resort para hacer realidad nuestros deseos.
En lo alto de una pequeña colina, se levanta el hotel, rodeado de un mar de olivos. Nos llama la atención su magnífica puerta de acceso, dando paso a unos volúmenes exquisitos. La decoración interior así como la disposición de sus habitaciones, es magnífica, de estilo moderno y art deco. Dispone de pistas de tenis, pádel, piscinas, ping-pong, sala de reuniones y eventos, bar, cafetería, restaurante y biblioteca. Cuenta con 30 habitaciones, con una carta de almohadas, conexión a internet, un largo etcétera, para hacer nuestra estancia maravillosa. Todo ello certificado con la Q de Calidad Turística y adherido a Rusticae.
Mariola y Tania nos comentan el origen de este sueño,
«Nuestro padre hace 30 años, se enamoro de esta finca de 120 hectáreas, cuando solo había olivos y viñedos. De su gran pasión por los caballos, nace la Yeguada San Jose. Inicialmente las yeguas eran para el recreo y posteriormente, es cuando se dedica a la cría de caballos de pura raza española. Toda la familia está involucrada en el negocio de la hípica, siendo premiada nuestra yeguada durante muchos años. La idea del hotel, nace durante una prueba hípica de doma clásica con música, un mes de octubre, al atardecer, invadidos por la música chill out, nos vimos rodeados por una magia especial y pensamos que por qué, otras personas no podían disfrutar de esa misma magia. En ese instante comenzó todo».
Aquí podemos también participar de torneos de Pádel, y para las empresas, realizan todo tipo de eventos por incentivos, además de trabajar en las instalaciones, pueden contratar todo tipo de actividades, como tiro con arco, paintball, etc… También se pueden celebrar bodas, pero es indispensable que sea pequeña, o que reserven el hotel completo, ya que lo primordial es no interferir en el descanso del huésped, y a veces ese tipo de celebraciones, no casan bien con el silencio.
La hostelería viene de tradición familiar, ya que sus padres Flora y Julio, tenían un pequeño bar, y casi todos los hermanos han crecido ayudando a su madre a pelar patatas mientras hacían los deberes escolares. Su padre fue un gran emprendedor y no le daba miedo nada. La primera idea, era crear un hotel de 7 habitaciones, y como los permisos tardaron unos 3 años, eso les dio tiempo a pensar en algo que les distinguiera. Querían crear un hotel cosmopolita, del tipo que te podías encontrar en la Gran Via de Madrid, pero en plena naturaleza y en medio del campo, con todas las comodidades posibles. Comenzaron con 14 habitaciones y ampliaron a la realidad actual de 30 habitaciones. Fue el primer hotel de Toledo con Spa. Se inauguró en noviembre de 2005, con un lleno completo.
«Mientras colgábamos cuadros, atendíamos a los primeros clientes. Todos los materiales son de primera calidad a pesar de que lo hicimos con presupuesto cero….y fíjate como ha salido. Estamos muy satisfechos de los elogios de los clientes».
En un breve plazo de tiempo, a pesar de la crisis, quieren introducir el golf en sus instalaciones, algo pequeño, para quitarte el mono del juego.
«No pretendemos ser un gran campo de golf, pero si darles a nuestros clientes lo que nos están demandando. Queremos ir acondicionado la finca, para conseguir un resort como puede haber en cualquier playa del Caribe. Queremos ofrecer a nuestros clientes, todas las posibilidades de ocio, ya que, tenemos el spa, la hípica, y así, aunque el tiempo no acompañe en invierno, tener cubierta todas las necesidades de nuestros clientes, y que si no quieren salir del hotel, no sea necesario buscar otras actividades en otros lugares».
Con una clientela muy variada, que va desde familias completas con niños, hasta clientes extranjeros que llegan a Toledo para cazar, preparan las habitaciones con mucho esmero. Disponen de un espacio para los más pequeños, un rinconcito en la biblioteca, de juegos para los niños, además de un futbolín. El fuerte en la actualidad es el de las parejas, con estancias románticas. Es un establecimiento adherido a Rusticae y Ruralka, y ello les hace obtener un cliente especial, que busca lo extraordinario.
«Hemos conseguido desde que abrimos la Q de Calidad, que aporta prestigio, diferenciación, fiabilidad y rigurosidad, ya que pasamos unas estrictas auditorias que aseguran la calidad, seguridad y profesionalidad en el servicio que ofrecemos a nuestros clientes».
Amantes de la naturaleza y los animales, han creado el HOTEL CANTYDUBI, comandado por Marga, para atender a clientes que viajan con su mascota como para cualquier cliente que no se hospede en el hotel. Aunque si lo desean en el propio hotel, la mascota puede pernoctar con el
huésped en su habitación, aunque no pueda usar las zonas comunes. Cantydubi, piensa en perros; trabaja en positivo, exento de castigo, ofreciendo servicios para disfrutar de tu perro, como adiestramiento, educación en domicilio, etc.
«No cerramos en ninguna época del año, estamos abiertos los 365 días del año, ya que en cada estación del año, preparamos fiestas especiales para celebrar con nuestros huéspedes. En recepción contamos con el apoyo de Alicia, Andrea, Ana, Carmina y Yudith, para que todo sea posible. En sala contamos con Elvis que nos asesora en el maridaje de los vinos y en bebidas premiun, ayudado por Victor, Laura, Jaime y Khalid».
El Spa Agua y Luz, esta comandado por Mamen, fisioterapeuta, junto con Tania y Toñi. Es un equipo joven y con mucha ilusión, donde además del circuito del spa compuesto por sauna, baño turco y piscinas de masaje, ofrecen tratamientos como la ducha vichy y todo tipo de masajes, para poner en armonía la mente con el cuerpo.
Debemos resaltar, su magnífico Restaurante Mar de Olivos. Para deleite del cliente hospedado en el hotel y también para el cliente de calle. El artífice de su mágica cocina es el joven chef de la escuela de Adolfo; con solo 24 años, Gabriel Cervantes, ha ideado una carta que cambia cada temporada, nutrida por los mejores productos recibidos de Madrid y de los alrededores. Podemos comenzar con una degustación de quesos de la zona, exquisitas croquetas de jamón, buñuelos de bacalao, pisto manchego con huevo poché, para continuar en los entrantes podemos elegir, la sopa castellana, la ensalada templada de mozzarella, la crema Lorraine, los chipirones encebollados o las verduras braseadas al dente, sin olvidarnos del puchero de garbanzos con callos; en cuanto a los pescados tenemos un bacalao confitado, la suprema de salmón y la lubina al horno, las carnes tienen su representación en el solomillo ibérico y el de buey, el confit de pato, pasando por el venado marinado en su jugo y las carrilleras al cacao
sobre crema de manchego. Los postres están representados por la milhojas abizcochada de queso de cabra, el brownie de chocolate, la quesada con Mouse de frutos rojos, el cilindro manchego relleno de mazapán y el postre «locura» que es una gelatina de coca cola con fresas confitadas y helado de vainilla con peta zetas.
Desde las páginas de Maridajes y Más, animamos a nuestros lectores, para que no dejen pasar la oportunidad de disfrutar y desconectar, en este maravilloso enclave, donde podemos hacer de todo, o simplemente no hacer nada y disfrutar del silencio.
No hay comentarios:
Publicar un comentario